Schmidt, Helmut

esta gran síntesis de una ciudad del Atlántico y el Alster, de Buddenbrooks y Bebel, de vivir y dejar vivir

Bonn como capital alemana es una triste broma pero una realidad

El pueblo alemán puede tolerar una inflación del cinco por ciento mejor que un desempleo del cinco por ciento.

Lo que hemos hecho los socialdemócratas durante nuestra labor de gobierno puede y debe ser la base de cómo cumpliremos en el futuro con los deberes de nuestro pueblo

El comercio del libro es una red de estaciones de servicio espiritual

Nunca se debe subestimar la estupidez de los gobiernos

El sindicato unificado, creado después de la guerra por mujeres y hombres inteligentes y con visión de futuro, demuestra su valía cada día

Amo esta ciudad con sus anglicismos apenas velados en formas y gestos, con su ceremonial orgullo en la tradición, su pragmatismo comercial y al mismo tiempo su provincianismo entrañable

La responsabilidad del gobierno de ayer debe ser reconocible en la oposición de hoy, y el trabajo de la oposición de hoy debe permanecer reconocible en la práctica de gobierno de mañana

Todo alemán debería tener derecho a comprar su propio coche, por eso queremos construir las carreteras para ello

Contrato de coles y nabos

Los mercados son como los paracaídas: solo funcionan cuando se abren

En más de 50 años, hemos cambiado la Ley Básica con más frecuencia de lo que los estadounidenses han cambiado su constitución en más de 200 años